LEOPOLDO MENDÍVIL

Crónica Confidencial / ¡Todos unidos por el estado de Derecho!

CIDE: Crónica de un golpe anunciado

 

MTRO. JAIME VALLS ESPONDA,

ASOCIACIÓN NACIONAL DE UNIVERSIDADES E

INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR:

+Cuando veas las barbas de tu vecino

cortar, pon las tuyas a remojar

Refrán popular  

             

Hace dos días se consumó un golpe -aún no mortal- contra el Centro de Investigación y Docencia Económica -CIDE-, que perpetró la doctora María Elena Álvarez Buylla, directora general del CONACYT a través de la Asamblea General de Asociados del CIDE, pues logró finalmente reformar el estatuto general de este organismo para legitimar la designación de José Antonio Romero Tellaeche como su director general.

Vaya nuestro reconocimiento a la Secretaría de Economía y a El Colegio de México por haber votado en contra.

¿Por qué nos debería importar lo que pasa en el CIDE? Porque si bien es pequeño en alumnado en comparación con otras instituciones, le caracteriza su alto nivel de excelencia en la formación de estudiantes de grado, en investigaciones sociales y en las asesorías que presta a gobiernos estatales.

Tales credenciales no fueron suficientes para el inquilino de Palacio Nacional, quien acusó al CIDE del pecado o delito de moda -usted escoja-: ser neoliberal. Inmediatamente después, Álvarez Buylla “interpretó” los deseos de su patrón y se dedicó a acogotar al CIDE…

El primer apretón fue la desaparición de los fideicomisos, pues el CIDE se financia mayoritariamente con fondos federales. El segundo fue agotar al entonces director, el doctor Sergio López Ayllón, ignorando o despreciando sus gestiones para recuperar el financiamiento sin el que el CIDE no puede continuar sus tareas de investigación y sus cátedras de excelencia. No tuvo más remedio que renunciar anticipadamente, en agosto de 2021.

El tercer apretón ocurrió el 29 de noviembre pasado, cuando se anunció la designación de José Romero Tellaeche como director interino, con miras a permanente y brincándose el estatuto de gobierno del CIDE. El golpe económico fue grave, pero tal designación fue un mazazo a la inteligencia académica del CIDE; la actitud dictatorial de Romero hacia el claustro académico generó que estudiantes y maestros se opusieran abiertamente a su designación, lo mismo que una veintena de universidades nacionales y extranjeras.

Y es que cualquiera que lea las propuestas de Romero, se opondría igual. Van dos botones de muestra:

“Es importante -afirmó Romero– recuperar la esencia fundamental del CIDE, que es contribuir a la formación de profesionistas comprometidos con el país y con el apoyo a su gobierno”. Quisiera saber cómo midió el director interino el poco compromiso que, a su juicio, tienen los egresados del CIDE. Peor aún resulta eso de “apoyar” al gobierno. ¿Acaso el CIDE va a cambiar de tono según cambiara el gobierno..? Señalar las fallas en las políticas públicas -si eso arrojan las investigaciones- y alertarlo para que no siga en el error ¿no es una forma de apoyar al gobierno?

Otra de las quejas de Romero es “la notable ausencia de posgraduados de universidades mexicanas. De la planta docente, 5 por  ciento procede de universidades de Estados Unidos y Canadá; 12 por ciento de México; dos por ciento de América Latina y 32 por ciento de Europa.” Habría que dar las gracias a esos catedráticos que regresaron a nuestro país a compartir sus conocimientos para formar más profesionistas, en vez de quedarse en el extranjero, donde sin duda tendrían mejores salarios y condiciones de investigación. ¿O acaso Romero quiere poner un muro de nopal alrededor del CIDE en plena globalización..?

El golpe al CIDE, así como las críticas a la UNAM y a la comunidad científica, confirman el desprecio que la actual administración federal tiene por la educación y la ciencia, así como su intolerancia a la libertad de cátedra y su obsesión por controlar a todo aquel que piensa.

Esta purga innecesaria en el CIDE lleva a preguntarse si la 4T tiene a otras universidades en la mira. De ser así y cualquiera que ésta fuera, dudo que los estudiantes se quedaran quietos.

Solo recordemos quién empezó el pleito…

Investigación: Upa Ruiz upa@delfos.com.mx

 

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