J ELEAZAR DE ÁVILA OPINIÓN

Pedro Luis Coronado Jubilado… deja al PRI…

Foto: Tamaulipas al 100

Por J. Eleazar Ávila

Lo que sobran en Tamaulipas son esta suerte de Pedro Luis Coronado, Jubilados. Fueron campeones en el PRI en tiempos de la supremacía, pero ahora, en la inopia política, se han reducido a ser personajes de «cartón piedra», seres sin alma propia, sin albedrío propio, sin cuerda propia.

Los de esta especie están, como el tlacuache, en tanatosis para hacerse el muerto y hasta sueltan un olor fuerte para mandar señal a sus depredadores que están «moridos», o como sugieren otros «pasándose de vivos esperando que el viento los lleve a una mejor vida de oportunidades ganadoras.

El caso que nos ocupa es interesante porque buena parte de su familia política está ya en PAN y otros en Morena. En este sentido, el pasado de muerto o de vivo, analiza si pone sus fichas en el casillero Guinda, en el Azul, o si se aguanta «machín» por aquello que ya hemos dicho aquí.

Pasado el mandato de Andrés Manuel López Obrador, «bienaventurados los priístas que se queden porque de ellos será el reino de los cielos tricolor».

Aquí una pregunta para Peluco y semejantes como pueden ser Ramiro Ramos Salinas, o Benito Sáenz Barrela. ¿Esta Cobardía Estratégica, realmente les va a dar frutos?

O solo están esperando que en el Draft 2024, sean ocupados y transferidos al PAN o a Morena que por esos días es el campeón de campeones.

Lo cierto es que al momento prevalecen inmóviles como «ranitas patéticas» a la vista de sus iguales. Los mencionados tiene el valor o les vale, como es el caso de tantos que prevalecen cómodamente en sus ranchos y casas del Valle de Texas, sordeados con una copa de tinto en la derecha y un Churchill en la izquierda.

¿De los que están en Modo Peluco, finalmente se quedaron sin agallas? ¿Saben que cuesta, pero si no tienen el talento para financiar sus propósitos valdría la pena declararse en bancarrota política y jubilarse?

Hablemos ahora de Alejandro Guevara Cobos, un personaje bipolar que solamente aparece cuando le conviene. No contesta llamadas, no cumple compromisos y luego finalmente cuando le conviene se aparece gritando, «llegue porque me necesitan»… ¿Neta, lo necesitan?

Y la misma pregunta para los mencionados al principio. ¿Necesita el PRI a Peluco, necesita el PRI a Ramiro, necesita el PRI a Benito?
¿Le sirve al PRI que dejaron en harapos Sergio Guajardo, Yahleel Abdala, el inefable Edgar Melhem, y el «cara de que hago aquí» de Carlos Solís?

¿Le sirvió al PRI el arrodillamiento de sus líderes antes el panismo cabeciano? Estamos a 20 días de que la dirigencia de Mayra Ojeda emita una convocatoria y seguro muchos de los mencionados se va a tomar la foto para finalmente, como en la canción de Serrat/La Fiesta.

«Y con la resaca a cuestas, Vuelve el pobre a su pobreza, Vuelve el rico a su riqueza, Y el señor cura a sus misas. Se despertó el bien y el mal». «La zorra pobre al portal, La zorra rica al rosal, Y el avaro a las divisas… «.

Y si, señores, hay mucha manera de dejar, de abandonar al PRI, como en el acto de contrición. Ojalá lo rezaran y aceptaran con dignidad. Pero como supongo que No se lo saben, pero se los recuerdo:

«Yo confieso ante Dios Todopoderoso, y ante ustedes hermanos, que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso, ruego a Santa María, siempre Virgen, a los ángeles, a los santos y a ustedes hermanos, que intercedan por mí ante Dios, Nuestro Señor. Amén.»

Pero como en los 43 municipios de Tamaulipas, todos tiene sus «Pelucos» sus «Ramiros», sus «Benitos». Todos por ahora en Pasivo, y se enojarán si les digo timoratos, que en lo único que les salva, es que todos tienen una causa superior; proteger los activos ganados en la bonanza, pocos o muchos, pero además de mantenerse en la sagrada ley de llevar «chuleta fresca» a la mesa de sus familias.

Y siempre lo diremos, todos los que habiendo logrado fortuna sin límite con cargo a la fortaleza que fue el PRI en Tamaulipas y México, su mezquindad siempre será sé mi parte censurable.
Le tienen tanto terror al sistema a que ellos mismos crearon, que mejor se hace el «muerto» y fingen demencia y no se atreven a mover un dedo por temor a que se los corten.

Eso sí, los pasados de vivos, ya se transfirieron a Morena y en grado menor al PAN… Y lo que sobran son evidencias…

Nostra Política: «La gran pregunta que nunca ha sido contestada y a la cual todavía no he podido responder, a pesar de mis treinta años de investigación del alma femenina, es: ¿qué quiere una mujer? Sigmund Freud.

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